lunes, 5 de marzo de 2012

No te despidas...


He visto a un hombre llorar derrotado. Y en sus lágrimas he podido apreciar su miedo.
He visto a un hombre cansado, fulminado, perdido… y, por mucho que he querido, y quiero, no puedo apaciguar ese dolor, no consigo devolverle su alegría.
He acariciado sus manos, casi temblorosas, como las mías, intendando prestar calor, y en ese intercambio de “te quieros” se nos estremeció el corazón.
No nos importó el lugar, ni aquella fría sala de espera de hospital, ni la señora, espectadora de lujo de primera fila y cómplice de nuestro amor…
No nos importaron las horas, ni nos ruborizó el ir y venir del personal… en aquel instante estábamos los dos sólos.  Abuelo y nieta, declarándose amor incondicional y eterno.
Por primera vez lloramos juntos el cariño mutuo que sentimos, aunque no me gustara  que te quisieras despedir de mi.
Abuelo, Te Quiero.  No te despidas de mi, porque el Amor no Muere y ya te he dicho que Aquí, Siempre, en mi Corazón te llevo.
Tu día está oscureciendo, pero no te preocupes, que pronto llegarán las estrellas para hacer de tu noche, el cielo más bello.
Mientras, coge mi mano, y vamos a querernos un poquito más, como antes, como ahora...





29 comentarios:

  1. Qué tristes son las despedidas, aunque sólo se trate de un hasta luego. Un beso.

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    1. Pues sí, son tristes, pero al menos tengo la gran fortuna de poder despedirme.

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  2. ¡Qué gran victoria saberse querido así! Y qué gran favor le estás haciendo a tu abuelo.

    Sigue así. No dejes que se derrumbe.

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    1. Sabes, hoy le he leído el blog. Le ha gustado mucho.

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  3. Pues sí, querida, por mucho que te duela su partida tienes que darle permiso para irse, porque aquí está sufriendo. Tienes que decirle que le vas a querer siempre, incluso cuando se vaya, pero que puede marchar tranquilo, porque tú estarás bien y cuidarás que no le olvide nadie, y que le hablarás a tus hijos de él. Dale permiso, de otra forma no se podrá ir en paz. Venga, querida, tú eres grande, tú sabes lo que hay que hacer. Besos

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    1. Gracias pesoleta. No me olvido lo que en su día me dijiste, y me ayuda mucho. Ayer fue un gran día. Ayer solté lastre, los dos lo hicimos. Ahora ya está.
      Gracias

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  4. Querida Leles.
    Si tu abuelo está sufriendo, te sugiero que le cuentes un cuento al oído.
    Un cuento que sea su propia historia, la de su tierra y la de la gente que ama.
    A veces, escuchar lo que has sido capaz de hacer en boca de un familiar, ayuda a enfrentarse al miedo, o por lo menos, lo puede mitigar.
    Las palabras precisas, curan.
    O al menos, son una ayuda.
    ...
    Un hombre con miedo sólo es un hombre que espera una buena historia.
    Cuanto más real, mejor.
    ...
    Y más tarde, esa historia te servirá a tí y a los tuyos.
    Te mando energía para acometer la tarea.

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    1. Cómo cuesta susurrar al oído cuando un nudo apenas te deja hablar, querido broder...
      Ayer le eché un par, o más... o no hizo falta... me salió rodado, sin pensar...
      Menos mal que no llegó nadie, menos mal que estábamos en el box de urgencias y el médico tardó horas en venir (quizás nos escuchó y quiso dejarnos intimidad), pero el caso es que ayer nos pasamos la tarde escuchando una historia de las buenas.
      Gracias amigo.

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  5. Leles, querida, un beso grande, mi oración para los dos. Un abrazo.

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  6. ABUELOS Y OFICIALES.

    Te encuentras doblando el Cabo de Hornos por primera, y tal vez, única vez.
    El choque de dos Océanos es virulento y potente.
    Eres un capitán adulto, condición necesaria pero no suficiente.

    Nadie te enseñó a efectuar la maniobra.
    La derrota de tu nave es aleatoria.
    Son los vientos y las olas quienes marcan el ritmo frenético.

    Miras el manual de navegación, más que nada para tranquilizar a tu segundo.
    Tú no sabes ni dónde tienes la mano izquierda.
    Ni la derecha.

    Y de pronto la ves.
    La gran ola asesina.
    Barrunta desde donde la vista te alcanza.
    Va avisando, más que otra cosa para que reces tus últimas oraciones.
    O tal vez tus primeras.

    Una enorme montaña de espuma de la altura de un gigante.

    El segundo te pregunta algo, pero no eres capaz de escuchar.
    El bramido de la ola es tan intenso, que supera los decibelios del miedo.

    Y ahí es cuando sólo tienes la opción de hacer una maniobra, sólo una.

    Desarbolas el velamen. Aumentas revoluciones. Enderezas la trayectoria. Cierras las escotillas y te encomiendas a los cielos y a los infiernos. Por ese orden.

    Y cuando consigues escuchar la pregunta del oficial.
    -“¿Qué hace capitán?”-

    Tú le dices la verdad, pues su vida está en tus manos.

    -“¡¡Lo que haría el abuelo, la maniobra de un oficial de la Armada!!”-

    Y te diriges de frente a la ola asesina. A toda máquina.

    Seguro de que es la mejor opción.

    Tal vez la única.


    Atentamente. Driver.

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    1. Allá va, hacia la ola asesina. A toda máquina.
      Se me ponen los pelos de punta...

      ¿Cómo se escribe una sonrisa?

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    2. Las sonrisas se escriben con el dedo índice, sobre la mano del que la recibe, puesta de plano.
      La sonrisa se escribe con el dedo corazón, sobre la frente del que la recibe, despejada de cabellos (si los hay).
      La sonrisa se escribe con el dedo pulgar, sobre el brazo del que la recibe, extendido a lo largo.
      La sonrisa se escribe con el dedo anular, jugando con un anillo, dejándolo deslizar por la palma.
      La sonrisa se escribe con el dedo meñique, tocando la oreja derecha y la oreja izquierda del que la recibe.
      ...
      La sonrisa se escribe en todos los idiomas de la misma forma, con los dedos de una mano.
      Cinco maneras diferentes de decir "te quiero".

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    3. Pues menuda forma más chula de escribir!!

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  7. Un abrazo, Leles. No sé qué puedo decir.

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    1. Ya está todo dicho, Lolo.
      Gracias por tu compañía.
      Gracias por estar ahí.
      Biquiños.

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  8. Ya no se que decirte, creo que ya te lo dije anteriormente, hay que ser un poco egoistas y aunque nos duela dejarlos ir con calma, a que te espere y descanse en paz. Tu solo puedes hacerle la marcha mas facil, que veo que ya lo has hecho....ahora a estar ahi con la gente que queda, tu padre, tu abuela, y tu, que tienes ahi a tus niños que te necesitan saltando y gritando en el salón al ritmo de los cantajuegos como si nada hubiera pasado. Ya sabes que aqui estoy....
    Un beso para el abuelo.

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    1. Rosa, tú ya lo sabes. No hace ni un año que estabas en lo mismo... qué te voy a decir que no sepas.
      Ya está en casa. Nos dijeron que es lo que hay, que esta enfermedad es así. Que está muy débil porque es lo que toca. No sé cuánto durará así. No lo sé. Ahora ya está todo dicho, creo que él ya está conforme, creo que ya puede descansar.
      Rosa, soy muy afortunada. Me siento una privilegiada por poder decirle tantas cosas, por poder hablar con él así, como ayer lo hicimos. No todo el mundo se puede despedir así de sus seres queridos y yo voy a dejar que se vaya con la tranquilidad de saber que se ha sentido querido. Buffff, qué momentos más jodíos!!! jajajaja
      qué mezcla de sentimientos, coño!!!

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  9. ...si paso es para acompañar Leles, si digo algo más...sobro.
    Un beso fuerte!

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    1. Gracias... voy a tener que hacer café...
      Son bajones que también forman parte de esta mierda de enfermedad. Se está acabando. no sé si éso es bueno o malo (es malo, porque se lo va a llevar), pero también es bueno (porque no quiero ver a mi abuelo así).
      Gracias.

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  10. Leles bonica. Casi que me apunto a la postura de Tomae broder. Aunque desde lejos físicamente, te acompaño... me quedo un rato a tu lado... Un abrazo fuerte y un beso, mi querida galleguiña. Sabes querer y este es el mejor regalo para tu abuelo.

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    1. Gracias sunsi. Me ha dicho mi abuelo que duda de si existe Dios, pues considera que ha sido una buena persona, un buen cristiano y que ahora está sufriendo mucho. Me dice que ahora sólo le pide que la partida no sea dolorosa y tener una muerte digna. Le dije que ahora más que nunca hay que tener Fe (y me ha costado), porque en parte estaba pensando lo mismo. Le dije que ahora hay que pensar que existe algo más, hay que creer y hay que confiar.
      Ojalá, después, me siga viendo desde el cielo. Y esté allí muy a gusto con los suyos...

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    2. Un padrenuestro por tu abuelo, galleguiña.Por la Paz de los últimos momentos. Ahora mismo. Un beso con todo mi cariño, leles.

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  11. Un abrazo Leles y ¡mucho ánimo!

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    1. Gracias la luna... no me faltan ánimos. Me falta tiempo!!

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  12. Yo...me be quedado sin palabras, con un nudo apretandome el corazón...por mas vueltas q le demos...por mas felices q seamos y por mucho q nos guste vivir...la vida es triste...cuanto mas feliz eres...mas triste...
    Un abrazo muy fuerte leles..

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  13. “La tristeza que hay en el corazón
    del hombre le abruma;
    pero una palabra amable le conforta”

    La Biblia. Proverbios, 12

    Un abrazo muy fuerte. No me olvido.

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